Dedos que se rozan,
manos que se unen
y escudriñan los rincones
más recónditos de cada ser.
Caricias que modelan lentamente
las formas ondulantes de los cuerpos desnudos.
La piel se eriza,
las manos juegan libremente
por cabellos desordenados.
Una furia loca de amor y pasión
desborda por los poros.
Labios que se saborean lentamente,
feromonas multicolores
y olores impregnantes.
Manos que se aprietan,
besos que desbordan,
abrazos inseparables,
piernas enmarañadas.
Y un estallido de amor intenso
que inunda los cuerpos y las almas.