¿Dónde están aquellos ideales de épocas pasadas?
¿Dónde?
¿Dónde están mi lucha y mi ideología?
¿Dónde?
LAS ANIQUILARON
¿Quién? ¿Qué?
La vida, los cambios sociales, el pesimismo de la gente,
el cansancio de los jóvenes, los políticos, los militares, yo.
Sólo queda el hastío de todo y el recuerdo de un ayer lejano.
Pero, me pregunto
¿Dónde?
Mi voz interior repite sin cesar:
los ideales, la lucha, mi ideología…
Muy débilmente una frase comienza a crecer:
“las ideologías no mueren nunca”
y mi boca comienza a pronunciarla
y el eco de mis palabras invaden todo,
aturden a la gente con su mágico poder.
¡Esa frase ha hecho el milagro!
y una nueva esperanza comienza a renacer.