La referencia a la belleza de la luna se ha convertido en una alusión literaria muy utilizada para decir te quiero, aunque esta frase pase desapercibida por el lector o espectador que no la conoce.
Hay una anécdota o un mito que asocia esta frase al novelista japonés Natsume Sōseki (1867–1916). Era profesor de Inglés y en un trabajo, un alumno tradujo en su texto «Te quiero» como 「我君を愛す」 (ware kimi o aisu) o「愛してる」(aishiteru).
Sōseki explicó a su alumno que un japonés nunca utilizaría 「愛す」(aisu), cuyo significado se acerca al de ‘amar’, sino que lo correcto sería traducir «Te quiero» como 月が綺麗ですね(tsuki ga kirei desu ne), “La luna está preciosa esta noche.”
Hace más de un siglo de esto, y sin duda en aquellos momentos la personalidad japonesa era muy reservada, lo que hacía aún más difícil que expresaran con palabras lo que sentían. Un japonés no diría «te quiero» como un occidental.
Aunque actualmente sigue sin ser usual que se utilice aishiteru fuera de la literatura o la ficción en general, tampoco parece creíble que se utilicen fórmulas tan sutiles para expresar el amor.